Los primeros cristianos, cuando querían representar simbólicamente a Jesús, nunca utilizaron el signo de la cruz. Para ellos, éste conservaba un significado siniestro y muy doloroso por el que no podía utilizarse para representar al Salvador del mundo. Sólo comenzó a usarse la cruz a partir del siglo IV cuando ya había perdido todo su significado como instrumento de tortura.
Por lo tanto, en la primera Iglesia se usaron otros símbolos para representar a Jesús. Se usó la imagen del Buen Pastor para representar a Jesús como un pastor con una oveja sobre sus hombros. Pero el símbolo que más perduró fue el del pez.
Si visitas las catacumbas de San Calixto en Roma (las más importantes de allí) verás fácilmente en las paredes los símbolos del pez.
Por cierto, es falso que los cristianos se refugiaran en las catacumbas como medio de huir del entorno romano que les perseguia. Los cristianos tenían sus salones donde se reunian y vivían con normalidad. Las catacumbas era más bien un lugar de enterramiento, si bien pudo ser utilizado como lugar de celebraciones en casos muy extremos.
No hay que olvidar que los romanos quemaban a sus muertos, como costumbre normal, extramuros de la Ciudad, pues se consideraba un hecho impuro dicha acción y no podía realizarse dentro de la misma. Sólo Julio César fue incinerado en el Foro Romano y allí se conservaron sus cenizas debido al gran amor que le profesaba el pueblo de Roma. Hoy en día, en el aniversario de su muerte en los idus de Marzo (el día 15) siempre aparecen unas flores en el lugar donde se conservaron sus cenizas. En la necrópolis de Carmona (localidad cercana a Sevilla) se conserva el enterramiento de un general romano que no fue incinerado y se reseña como un hecho extraordinario.
Retomando el tema de este artículo, explicamos un poco más detenidamente el origen de este símbolo. Este término en griego se escribe IXTHUS (transliterado I-X-TH-U-S y pronunciado ijzús) que los cristianos utilizaban como un acrónimo de la siguiente manera:
I (de Iesus): Jesús
X (de Xristos): Cristo
TH (de THeou): de Dios
U ( de Uios): Hijo
S ( de Soter): Salvador
Era una forma oculta de proclamar su fe en Jesucristo, Hijo de Dios Salvador.
Es posible que el símbolo del pez tuviera otros significados secundarios: Cristo como el Maestro que enseña a los discípulos a ser pescadores de hombres (el mar tenía siempre una connotación negativa, por lo que ser pescador de hombres era lo mismo que decir el Salvador), o en relación al milagro de la multiplicación de los panes y los peces. Pero su principal significado lo recibe del acrónimo que he reseñado más arriba.
http://principioscatolicos.blogspot.com/2009/02/por-que-el-simbolo-del-pez.html